Tetazas para un intercambio 2/2. Tal y como os prometí, hoy os voy a contar la continuación sobre mi relato. Para todos aquellos que no sepan el principio de la historia, os dejo este enlace. https://girls-barcelona.com/uncategorized/tetazas-para-un-intercambio-1-2/  Para que podéis saber mi experiencia sobre que » Mis grandes tetazas, serian el motivo tarde o temprano de mi primer incidente sexual con mi pareja».

Tetazas para un intercambio 2/2

Después de lo acontecido, no sabia como describir la situación. Por un lado, me sentía culpable y sucia por haber accedido a aquel juego. Pero por otra parte, no paraba de pensar en la tremenda polla de Carlos y la situación tan morbosa que había acontecido. Todo eso me excitaba muchísimo… A las pocas horas, me reencontré con mi marido. Tal y como habíamos hablado al ponernos las reglas, nadie hablo de lo sucedido. Lo que si que es verdad, es que esa misma noche y sin decirnos nada, tuvimos una de las mejores noches de sexo desenfrenado de nuestras vidas. Era tal la excitación acumulada ese día, que todo fue una explosión de jubilo.

La semana no había hecho más que empezar

Sea como fuera, aquel juego sexual de intercambiarnos las parejas por las mañanas, reencontrarnos para comer y pasar la tarde los 4 juntos. Por ejemplo, riendo, bebiendo, tomando el sol y sin comentar nada de lo acontecido por la mañana, era ya habitual. Por diversos motivos, decidí no tener sexo con Carlos. la situación me excitaba mucho pero no creo que fuera la persona a quien entregarme totalmente, mas allá de mi marido. Aún así, continué viéndome con el por las mañanas. Me magreaba las tetas, me las lamía, se hacía cubanas… Un día Carlos me pidió, si podía masturbarle y hacer le sexo oral, así podría tocarme las tetas con las dos manos. Tal y como le dije, no quería confundirlo mas allá de que se diera auto placer a la vez que podía verme desnuda y manosearme. Por alguna razón, un día accedí a tan solo masturbarlo… Me excitaba ver con el ansía que se masturbaba delante de mi. De sentirme deseada y ver como explotaba encima de mis pechos otro hombre que no fuera mi marido. Aquella situación me calentaba en exceso….

Ese día me duche, me puse completamente desnuda ante el, me quite las braguitas aunque le avise de que no haríamos nada mas de lo pactado.

He de reconocer, que sentía curiosidad de sentir su pene tan grande y grueso dentro de mi. Pero tal y como habíamos pactado, ese día me prepare. Me puse completamente desnuda ante el sin las braguitas. Me arrodille y deje que empezará como siempre, a manosear mis tetas. Su respiración se entre cortaba, aquello me subía a mil ver la reacción que le generaba a Carlos. Pude ver su grande pene justo enfrente de mi cara y con la mano derecha, lo empecé a tocar suavemente… Noté como sus venas se hinchaban, era como si fuera a explotar! Me estaba subiendo mucho el pulso y empecé a tener temblores fruto de mi excitación. yo veía la cara de satisfacción que generaba en el al poder magrearme los pechos a la vez que le estaba masturbando. era una situación muy extraña y muy morbosa, el estar dando le placer a otro hombre que no era mi marido… Carlos se armo de valor y me pidió mas, un poco mas… Yo no quería que se confundiera pero cada vez mas, me costaba controlar mis impulsos. De repente, el se agachó un poco y noté como sus dedos tocaban por completo mi vagina. le dije:

– Carlos, detenté. Eso no es lo pactado.

El siguió como si no hubiese dicho absolutamente nada

Sentí como sus dedos, empezaban a acariciar mi clítoris y mis espasmos fueron en aumento. Estaba en ese momento, sin control. Mi cuerpo y mi instinto no podían parar mientras le decía a Carlos que se detuviera, sin éxito… Sea como fuera, me acomodé un poco hacía atrás, mas de forma instintiva que otra cosa. El se inclino y empezó a lamerme de forma lasciva mi vagina. No podía controlarme mas! Estaba fuera de mi! Sin saber como, empecé a sentir un orgasmo interminable!…. Buffff

Mi instinto quería mas pero, debía controlarme. No podía entregarme a Carlos pero, estaba tan excitada. El primer orgasmo que tuve con otro hombre que no fuera con mi marido, fue apoteósico. Al final, me recline un poco, poniendo me a cuatro patas y dándole la espalda a Carlos. No tuve que decir nada mas… Sentí como su gran verga se introducía dentro de mi y de forma violenta, explote de jubilo otra vez! Mi segundo orgasmo con tan solo, la primera embestida.. El empezó a empotrarme de forma fogosa, viral y con ansias de un animal. Así que, sin poder seguir controlarme, volví a llegar a mi tercer orgasmo de forma descontrolada. De repente, Carlos saco su enorme verga, y eyaculo encima de mi culo…

Una vez finalizado, me enfadé con el por no haberme respetado. Por no haber hecho las normas pactadas pero he de reconocer, que estaba mas satisfecha que furiosa. El gran problema, era que no sabía que iba a pensar mi marido de mi….